lunes, diciembre 11, 2006





Eran dos extraños, dandose mil besos sin parar,
de un par de sonrisas nacen las caricias que no quisieron parar.

Se paso la noche entre vino y copas de champán,
besos y miradas sin decir palabras que pudieran molestar.

El tiempo se agoto y salieron de aquel bar enfermos de pasión,
prendados de ese amor la luz del dia los separo,
como vampiros un amanecer no se volvieron a ver.


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