Eran dos extraños, dandose mil besos sin parar,
de un par de sonrisas nacen las caricias que no quisieron parar.
Se paso la noche entre vino y copas de champán,
besos y miradas sin decir palabras que pudieran molestar.
El tiempo se agoto y salieron de aquel bar enfermos de pasión,
prendados de ese amor la luz del dia los separo,
como vampiros un amanecer no se volvieron a ver.
-